España, al fin, se reconoce

Y España despegó. Con retraso, pero lo hizo a lo grande. Ante Lituania, que no había perdido un partido hasta ayer, la Selección jugó como no lo había hecho en Río. Fue el equipo de las platas olímpicas, el campeón del mundo, el que ganó tres Campeonatos de Europa. Fue ES-PA-ÑA. Y eso es mucho. Liderada por Pau, la Selección mostró una imagen que se ajusta mucho más a la realidad que lo visto en los tres partidos anteriores. Ahora se trata de mantener la tendencia, lo que ha sucedido tantas y tantas veces y la mayoría con final feliz. Espera Argentina en la última jornada y las cuentas son claras: se trata de ganar para clasificarse y si los resultados son normales, España terminaría tercera. Eso supone no ver a Estados Unidos hasta la final. Con demasiados sobresaltos, pero la primera fase debe acabar como se deseaba.

Cuando más falta hacía, cuando ya no había vuelta atrás, España comenzó a parecerse al equipo que ha asombrado en Europa y en el mundo en los últimos 15 años. No quedaba otra. Ante Lituania se trataba de ganar o ganar. Y este grupo conjuga ese verbo como nadie y, además, no lo hace de cualquier manera. Ganan y lo hacen bonito. El caso es que se irá una generación irrepetible y seguirá sin haber una explicación clara de la transformación que acostumbra a sufrir la Selección en muchos los grandes torneos. La imagen mostrada ayer está en las antípodas de la ofrecida ante Croacia, Brasil y Nigeria. Desde los nombres propios a todo el colectivo, España fue otra. Del equipo triste y enfangado se pasó a un bloque en el que las ideas estaban clarísimas. La necesidad fomenta el talento.

Hubo alegría, se recuperó la chispa como si lo sucedido en los tres partidos anteriores hubiera pasado en otro campeonato. No habían pasado ni cinco minutos y ya habían anotado todos los componentes del quinteto. Hasta Ricky había «enchufado» un triple y no fue el único. ¡Consiguió dos más! Había soltura y el trabajo en los dos lados de la cancha revelaba una soltura desconocida hasta ahora. Con Ricky, Llull y Rudy en el perímetro es muy difícil que el rival viva tranquilo. Si ellos trabajan a su nivel, los dos interiores saben que tienen que preocuparse bastante menos. Pau y Mirotic tienen menos trabajo y eso repercute en su incidencia en ataque. Mirotic se fajó por dentro como no había hecho en todo el campeonato y Pau… Gasol sigue siendo único. Una de sus grandes virtudes es que puede ser decisivo sin necesidad de acaparar juego. Sólo su sombra es capaz de ayudar a los compañeros. Anotó, reboteó, asistió, defendió… Y como si la exhibición de los dos primeros cuartos no hubiera sido suficiente, anotó tres triples seguidos en el arranque del tercero. Valanciunas se despistó en el primero. Los dos siguientes fueron con el pívot encima. ¡Cinco triples sin fallo! Recordó a los seis que anotó ante Polonia en el pasado Eurobasket. El resto se ánimo y más de uno empezó a tomar nota. 31 asistencias, 16/32 triples, todo el mundo participando… España ha llegado a Río. Ante Argentina hay que confirmarlo y a partir de ahí…

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