Con el espíritu de Lopetegui

Julen Lopetegui estaba ya en Madrid, a punto de ser presentado por su nuevo equipo, pero su espíritu estaba presente en Sochi, donde España preparaba su estreno en el Mundial contra Portugal. Por eso, en la conferencia de prensa previa, importaban más las palabras de Sergio Ramos que las del nuevo seleccionador, Fernando Hierro. Es una costumbre que antes del primer partido de un gran torneo sean los capitanes los que hablen y el vestuario, ese ente inmaterial en el que todo acaba, se hizo carne en los tatuajes de Sergio Ramos. «Sentimos que Julen va a ser parte de lo que suceda en esta Copa del Mundo», dijo el capitán de la Roja, aunque prefiera centrarse en lo que va a suceder a partir de ahora. «Había que pasar página cuanto antes. No ha sido nada agradable. Julen ha sido parte de todo esto, pero España debe estar por encima de cualquier nombre propio. Cuanto antes vayamos dejando el tema, mejor», asegura el central.

Sobre la labor de los jugadores en el proceso de destitución de Lopetegui, Sergio prefiere echarse a un lado, a pesar de que reconoce que manejaba algo más de información que los demás. «Cuando eres capitán te toca saber un poco más de la cuenta en situaciones de mayor repercusión. Nosotros podemos opinar, pero los que tienen que tomar decisiones son otros. Cuando hay decisiones institucionales debemos mantenernos al margen», admite. «No somos nosotros los que tenemos que valorar ahora. Son decisiones que no nos corresponden a nosotros. La parte deportiva es la que nos corresponde. No sé si [Lopetegui] se habrá equivocado o no, pero no somos nosotros los que tenemos que decirlo».

«Se aprende en los momentos malos. Cuando vienen problemas es una oportunidad de crecer, nos sirve para estar más unidos. Nada nos va a descentrar», dice.

Fernando Hierro estaba a su lado, casi como un espectador, pero también recibió los elogios del capitán. «Qué persona mejor que Fernando para cubrir esa ausencia que era muy notable. Es un jugador al que admiramos desde hace mucho tiempo, nos conoce muy bien y es de los más idóneos para hacer una Selección con esa misma ilusión y esos mismos sueños», asegura.

Los futbolistas ven a Hierro como un miembro más del equipo que ha trabajado con ellos durante los últimos tiempos. Y el nuevo seleccionador tampoco parece dispuesto a cambiar demasiado el equipo. «La premura es la premura. Respetamos el trabajo realizado durante estas dos semanas. Tenemos confianza plena en nuestro equipo, estamos en un buen momento y perfectamente preparados. Estas dos semanas han sido intensas. Confiamos en los chicos y en la idea en la que llevamos trabajando dos años», asegura el seleccionador. «Hay muy poco tiempo y por eso vamos a cambiar pocas cosas. Tenemos claro lo que queremos, son dos semanas de preparación, hay mucha gente del anterior cuerpo técnico, en ese sentido no va a cambiar, es imposible. Será una España reconocible, que quiera jugar bien, que quiere ser protagonista con nuestras características. No vamos a dudar de nuestra identidad, de lo que representamos y de lo que sabemos hacer», asegura Fernando Hierro.

«No va a cambiar nada, nuestra ambición sigue intacta. Debemos afrontar los partidos como finales, es un extra de motivación y debemos estar a la altura de lo que nos jugamos y que no sea una excusa lo que ha ocurrido. Hay que dejarlo todo al margen y centrarnos en jugar al fútbol, que es lo que sabemos hacer», insiste Sergio Ramos. El discurso del capitán se inspira en el del nuevo seleccionador y el del nuevo técnico en el del antiguo. Nada cambia, aunque Lopetegui y su cuerpo técnico ya no estén con el grupo al que llevaron invicto hasta Mundial.

«No hay ninguna grieta en el vestuario. Cada uno somos de nuestra madre y pensamos distinto, pero la idea colectiva es la misma, ir a por el Mundial, y eso no lo va a cambiar nadie ni nada. A nivel personal fue un momento muy delicado, pero hay que dejar lo personal a un lado y centrarnos en el Mundial. Esto nos va a hacer más fuertes, nos va a hacer estar más unidos, valorar lo que es estar en un Mundial que cuesta muchísimo y aprovechar todo el trabajo que hay detrás de esas paredes», insiste Sergio. «Estoy muy tranquilo y mi conciencia, también. Soy como soy, lo vengo demostrando durante muchos años y el que quiera que vea el currículum, si encuentra una Copa más que pueda ganar que me lo diga», afirma. Y para terminar, una sonrisa, «que vamos a empezar el Mundial y esto parece un tanatorio».

Source: Deportes