Your ads will be inserted here by
Easy Plugin for AdSense.
Please go to the plugin admin page to
Paste your ad code OR
Suppress this ad slot.
Confieso que soy casi como Joaquín, el futbolista del Real Betis, que no ha visto una carrera en su vida. No llego a ese punto, pero reconozco que no soy el mayor experto en motociclismo. Pero sí que puedo juzgar la comunicación. Sí puedo criticar cómo se ha contado en Italia la caída de Marc Márquez ante Valentino Rossi. Sí puedo denunciar la campaña de desprestigio salvaje hacia el piloto español, que encima fue al que tiraron al asfalto.
w Se equivocaron los dos
No voy a tampoco a juzgar a Márquez. Seguramente, como nos contó Fonsi Nieto en «El Chiringuito», Marc taponó a Valentino alterando un pacto no escrito entre pilotos y dejó que la rivalidad y la tensión entre ambos de toda la temporada, todo a más de 200 kilómetros por hora, se impusieran a ese código. Probablemente, Marc se equivocó. Pero también lo hizo Rossi poniéndole en peligro al tirarle de la moto y mandarle al suelo. Hubo dos culpables, aunque desde Italia nos vendan que toda la culpa es del español y que Rossi es la víctima.
Provocaciones
Your ads will be inserted here by
Easy Plugin for AdSense.
Please go to the plugin admin page to
Paste your ad code OR
Suppress this ad slot.
La provocación frente a la misma casa de Márquez de dos periodistas de un programa italiano presuntamente gracioso es un ejemplo de a dónde está llegando todo esto. Igual que esa pancarta donde los tifosi del Nápoles le pedían a su compatriota que en Valencia corra «Sin reglas: tibia y peroné». Estas campañas están generando más violencia que los propios pilotos.
Que hablen ellos
Echo de menos haber escuchado a Rossi pidiendo disculpas. También me habría gustado oír a Márquez explicar lo sucedido tras la carrera. Comentaristas, aficionados, pilotos de Fórmula Uno, amigos, entrenadores de fútbol… todo el mundo habla menos los dos implicados. Llevamos toda la semana con este rifirrafe en los medios, con noticias, debates y análisis de todo tipo. Que si se protege Rossi, que si le da una patada, que si le da al pedal o no… siete días dándole vueltas y más vueltas. Y toca poner algo de cordura. Esa no es la imagen que debe dar el motociclismo. Ni es la imagen que debe dar el deporte.
A disfrutar en Valencia
El domingo, Valencia tiene la oportunidad de disfrutar de un magnífico Gran Premio, el último de la temporada y con el título mundial en juego entre Valentino Rossi y Jorge Lorenzo. Españoles e italianos estarán muy cerca en las gradas y hay que evitar a toda costa que un día grande para las motos se termine convirtiendo en una batalla campal. Ojalá desde la conferencia de prensa los dos pilotos salgan juntos ante los medios de comunicación a dar ejemplo. Me gustaría ver cómo se dan un abrazo antes de competir en Cheste, como los dos campeones que son, jugándose el tipo a todo gas encima de sus motos, pero respetando al adversario. Y que quede claro: cada uno puede tener su opinión sobre lo que pasó en Malasia, pero después de esta campaña nauseabunda, somos de Márquez.
Source: Deportes