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Jorge Lorenzo ha recibido esta mañana en Barcelona el Porsche Cayenne que va a conducir a partir de ahora. Un coche a la altura del campeón mundial de MotoGP y líder tras la primera de la temporada en Qatar. Es el más fuerte hoy por hoy, a pesar de reconocer que no las tenía todas consigo antes de que el semáforo se apagara en Losail. “Fue una victoria muy luchada, para nada fue fácil. Es de las tres mejores que he tenido, en la parte final de la carrera lo di todo para intentar abrir unas décimas y la lucha entre Marc y Dovizioso me permitió irme un segundo. Pero hasta ese momento me las vi y las deseé para mantener una pequeña ventaja. Antes de la carrera lo veía muy crudo, porque Márquez tenía un ritmo superior al mío. Dimos en la diana con la elección de la rueda blanda”, contaba Jorge, que quiso explicar en qué momento se encuentra su renovación o no con Yamaha. “Pudiendo haber renovado una semana antes del comienzo del campeonato decidí esperar. Estoy valorando tres factores: el rendimiento de la moto, la oferta económica y valoración dentro del equipo. El cariño también es importante, pero por delante de esto quizá esté la competitividad de la moto, porque quiero luchar siempre por el título”, explicaba el mallorquín, que no está de acuerdo con algunas versiones que hablan de que no se siente querido en su equipo. “No es que me sienta infravalorado, para nada. De hecho me siento muy valorado y la decisión será personal.
Source: Deportes