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«Estoy contento. Sólo en la derrota contra el Arsenal y en el empate contra el Crystal Palace no hemos sido mejores», decía Van Gaal antes de jugar contra el Wolfsburgo. Ahora, las cosas han cambiado. Los 250 millones de libras, casi 350 millones de euros, que se ha gastado Louis van Gaal en fichajes desde que se hizo cargo del Manchester United no han servido para mucho. Fue cuarto en la Premier la temporada pasada y tuvo que superar al Brujas en la previa para acceder a la fase de grupos de la Liga de Campeones. Pasó por encima del equipo belga, pero luego llegó la decepción.
En la fase de grupos ha sido superado por el Wolfsburgo y el PSV y sólo ha sido mejor que el CSKA. La derrota en Alemania en la última jornada confirmó el desastre. La tercera plaza, que da acceso a la Liga Europa, tampoco sirve de consuelo. El equipo estaba previsto para otra cosa, igual que el fichaje de Van Gaal. «No tengo excusas y cualquier palabra que diga va a ser un error», aseguraba el entrenador holandés después de perder contra el Wolfsburgo. «Estoy triste por los jugadores», afirmaba, aunque encuentra motivos para el optimismo. «Todavía estamos en una buena posición en la Premier, por lo que estamos mejor que el año pasado», afirma. El curso pasado el United no disputó ninguna competición europea, por lo que resulta complicado comparar. «Pronto te das cuenta de que es imposible discutir con Van Gaal. ¿Cómo vas a discutir con alguien que nunca se equivoca?», decía ayer Dave Kidd, el columnista del «Daily Mirror», citando a un directivo de un antiguo equipo de Van Gaal.
El holandés no admite errores, pero la eliminación ha avergonzado a las leyendas del club. «Es vergonzoso haber caído en la Liga de Campeones y tener que disputar la Liga Europa», se limitaba a decir Rio Ferdinand en su cuenta de Twitter. «Este equipo puede quedarse sin jugadores de primer nivel la próxima temporada», asegura Michael Owen. El principal temor es la salida de De Gea, al que el verano pasado sólo un error inexplicable hizo continuar en Old Trafford. En Mánchester piensan que su futuro sigue ligado al Real Madrid, especialmente si en su actual equipo no son capaces de ofrecerle un proyecto ganador. Algo que, de momento, no han conseguido a pesar de haberse gastado 75 millones en Di María la temporada pasada –nunca logró entenderse con Van Gaal y fue traspasado al PSG a la primera oportunidad– y 80 en Martial al cierre del último mercado. Además, en los dos últimos años han llegado jugadores como Ander Herrera (36 millones), Luke Shaw (37,5), Rojo (20), Blind (17), Schneiderlin (35), Depay (27,5) o Schweinsteiger y Darmian (18 cada uno).
Pero lo más grave para Paul Scholes, leyenda de los «Fergie Babes» es que el equipo está perdiendo su personalidad. «Los errores en los fichajes de Van Gaal han dejado al equipo sin instinto asesino», asegura. El mánager del United ha fracasado en su intento de contratar a futbolistas como Sergio Ramos o Pogba, que hubieran permitido dar al equipo un salto de calidad. A Van Gaal tampoco le han ayudado las lesiones. Algunas graves, como las de Luke Shaw, Valencia o Schneiderlin. Otras, no tan importantes, como las de Rooney o Ander Herrera, pero el holandés no pudo contar con ninguno de ellos en el encuentro decisivo de la Liga de Campeones contra el Wolfsburgo. Pero ya lo dice el mismo Van Gaal: «No tengo excusas». Tampoco le ayudarán a buscarlas.
Source: Deportes