Federer cambia a Edberg por Ljubicic

Your ads will be inserted here by

Easy Plugin for AdSense.

Please go to the plugin admin page to
Paste your ad code OR
Suppress this ad slot.

«Después de dos años de gran éxito, me gustaría dar las gracias a Stefan Edberg, mi ídolo de la infancia, por haber accedido a unirse a mi equipo. Fue un sueño hecho realidad. A pesar de que se suponía que era sólo para 2014, Stefan estuvo genial y acordó ampliar la asociación también este año, lo que me gustó. Me enseñó mucho y su influencia en mi juego permanecerá. Él siempre será una parte de mi equipo».

(function(d, s, id) { var js, fjs = d.getElementsByTagName(s)[0]; if (d.getElementById(id)) return; js = d.createElement(s); js.id = id; js.src = «//connect.facebook.net/es_ES/sdk.js#xfbml=1&version=v2.3»; fjs.parentNode.insertBefore(js, fjs);}(document, ‘script’, ‘facebook-jssdk’));

After 2 very successful years, I would like to thank Stefan Edberg, my childhood idol, for agreeing to join my team. It…

Posted by Roger Federer on Martes, 8 de diciembre de 2015

Con estas palabras, Roger Federer ponía fin a su relación como entrenador-tenista con Stefan Edberg, el hombre que le reflotó para el circuito después de un 2013 para olvidar. Ese año, Federer sólo conquistó el título de Halle y en Wimbledon, por ejemplo, fue eliminado en segunda ronda. «¿Es el fin?», se preguntaban todas las portadas respecto al que muchos consideran el mejor de tenista de la historia, el ganador de 17 títulos de «Grand Slam». Otros titulares quitaban el interrogante. Pero Federer no se rindió y se puso en manos de otro mito, éste ya retirado: Stefan Edberg. El sueco, rey de las voleas, hizo entender a su pupilo que tenía que cambiar el patrón de juego para volver a ser competitivo. Que debía volver un poco a los orígenes, a la agresividad, y a abandonar en cuanto pudiera el fondo de la pista, pues superada la treintena el físico ya no le daba para aguantar partidos duros ante los mejores del mundo. El despertar de Federer fue enorme. En los dos años con Edberg no ha ampliado su cuenta de títulos «grandes» (Ha disputado tres finales, dos en Wimbledon y una en el Abierto de Estados Unidos, todas perdidas ante Djokovic), pero ha dejado un puñado de buenos partidos, ha vuelto al «top 3» y ha sumado tres Masters 1.000 más. En su deseo por seguir mejorando, este curso se ha inventado el resto-red, incluso con primer servicio, para sorprender a sus oponentes.

Federer atisba el final («Es una pena que me esté haciendo tan mayor y que me quede poco tiempo en activo. Tengo todavía muchas ganas de seguir y todavía me divierto jugando a tenis», aseguró el suizo en una entrevista a «Blick»), pero al menos un año más seguirá, porque la marcha de Edberg ha venido acompañada de la contratación de Ivan Ljubicic, ex tenista croata que ahora tiene 36 años. Fue rival de Federer, al que consiguió vencer en tres ocasiones por 13 derrotas; llegó a conquistar un Masters 1.000 (Indian Wells, en 2010) y fue número tres del mundo. Tenía un saque poderoso y quizá ése sea uno de los aspectos que busque mejorar el suizo, aunque ya tiene un servicio envidiable. Ljubicic ha estado dos años entrenando al canadiense Raonic y le hizo mejorar mucho, centrándose principalmente en el saque y la derecha. Además, Severin Luthi continúa en el equipo de Federer.

«Después de un increíble 2014, decidí continuar por un año más, pero con un claro entendimiento de que sería mi último año dado el compromiso de tiempo. Creo que Roger todavía tiene mucho más para dar al deporte del tenis y es capaz de ganar los grandes eventos», destaco Edberg. Su bonita historia juntos ha terminado. Federer afrontará muchos retos en 2016: tratar de ganar otro «Grand Slam», los Juegos de Río… y en 2015 se ha demostrado que tenis le queda. Las derrotas con Djokovic, sobre todo en el Abierto de Estados Unidos, fueron más mentales. Por ahí también tendrá que trabajar Ljubicic.

Source: Deportes

Diseño web GrupoUnetcom | motores electricos | Periodoncista Madrid | Viajar por el mundo | Empresa de reformas en Madrid | Apple Watch | |