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Nacho Díaz entró en el campo a falta de tres minutos como una medida desesperada del seleccionador español, Santi Denia, para encontrar el empate. Y el empate llegó en un córner en el tiempo añadido que cabeceó el delantero español sin que las blandengues manos del guardameta inglés pudieran detenerlo.
Era el premio merecido por España, que había jugado mejor, que había querido siempre la pelota y que dominó el partido, especialmente desde el segundo gol de los ingleses. Con el marcador en contra y nada que perder, España sacó lo mejor que tenía. Sergio Gómez dejó la banda para dominar el encuentro desde el centro y las oportunidades fueron llegando. Al «10» de España le sacó una el portero cuando parecía que sólo tenía que empujarla tras una gran jugada de Moha. Después una rosca desde la esquina del área se le marchó por encima del larguero. Tampoco acertó Abel Ruiz con las suyas. El capitán español ya había hecho lo mejor del partido cuando supo ver la llegada de Morey por el centro para regalarle el empate a uno en la primera mitad.
España había reaccionado al primer tanto de los ingleses de la misma manera que lo hizo después con el segundo, con fútbol. Pero parecía condenarse por la fragilidad defensiva. Hudson Odoi no encontró oposición para marcar el primero y Álvaro, el guardameta español, no pudo llegar al disparo de Foden pegado al poste en la segunda mitad. Sí había acertado el portero de la Roja con el remate de Hudson Odoi en el comienzo de la segunda mitad.
España tenía la pelota e Inglaterra el remate. Hasta que apareció Nacho Díaz para cabecear un córner y obligar a que el título se decidiera en la tanda de penaltis. La cara de desesperación del guardameta inglés indicaba que no era el que mejor preparado estaba para responder a los lanzamientos de los rivales. Inglaterra vio cómo se le escapaba un título que ya agarraba y España encontraba otra oportunidad desde los once metros. La nueva norma de lanzamientos, un tie break, como en el tenis, en el que un equipo tira el primero y después cada uno lo hace de dos en dos dejó a España a un paso del trofeo en su tercer penalti. Inglaterra sólo acertó con el primero de la tanda y Chust dio el título a la Roja.
Source: Deportes