"El juego es de los futbolistas"

El fútbol es también una cuestión de estilo para Joaquín Caparrós. «El éxito de un entrenador es sacar el máximo rendimiento de los futbolistas que tengas. Si tienes un regateador, tiene que regatear», explicaba Joaquín Caparrós ayer en el foro organizado por la agencia Efe. Un encuentro que estaba previsto «desde hace dos meses y medio», explica Luis Villarejo, el presentador del acto. En el fondo de sus palabras está la Selección, el destino al que le gustaría llegar para suceder a Vicente del Bosque. «El modelo es la suma de muchas cosas, pero el juego es de los futbolistas», insiste Caparrós. Piensa en los que fueron, en los que son y en los que vienen, como Denis Suárez y Marco Asensio.

«En la Eurocopa no ha habido una selección mejor que la nuestra. El mejor fútbol lo han hecho España, Alemania y puede que Croacia», añade. «No hemos visto selecciones con el talento de la nuestra. Lo que sí nos ha demostrado la Eurocopa es que tenemos los mejores jugadores del mundo», añade. Y se refiere también a la Liga española. «Es un privilegio tener a nuestros jugadores nacionales, a Cristiano, a Griezmann, a Kroos…».

Caparrós no habla de su posible futuro como seleccionador, pero sí elogia el legado de Vicente del Bosque. «No sólo por los éxitos deportivos, sino por lo que transmite. Su herencia es muy grande por los títulos y por los valores», asegura. Del Bosque y Caparrós se criaron en el mismo lugar, en la cantera del Real Madrid. Joaquín dejó pronto el fútbol como jugador, pero ya tenía curiosidad por aprender a ser entrenador. Cuando llegó Miljan Miljanic al banquillo madridista se quedaba viendo los entrenamientos. Era un paso más allá de lo que se hacía hasta ese momento. Miljanic, por ejemplo, fue el primero en llegar a España con un preparador de porteros.

Con los años, Caparrós ha ido añadiendo valores a su equipo técnico. Además de su inseparable Luci, su segundo entrenador, con el tiempo fue incorporando, además del equipo clásico con un preparador físico y un entrenador de porteros, a un readaptador –recuperador– que en el Athletic era el hijo de Javier Clemente, y un técnico de grabación. «Me lo recomendó Luis Llopis», explica. Llopis es el preparador de porteros que trabajó con él, el que le descubrió a Keylor Navas y que ahora sigue trabajando con el portero costarricense en el Real Madrid. Eso le permite corregir al jugador inmediatamente después de terminar el entrenamiento. «En el equipo técnico es fundamental un jefe de comunicación que esté con nosotros como otro técnico más. Nos ha ayudado personalmente y a los jugadores también», explica. Caparrós concede mucha importancia a los valores que transmite a los medios. Por eso, cuando comenzó a trabajar en el Athletic con Iker Muniain –entonces una criatura de 14 o 15 años– le hacía asistir a las ruedas de prensa de los mayores. «Luego le preguntábamos qué había dicho. También lo hicimos con Reyes y con Jesús Navas», explica.

Caparrós ha aprovechado este año sabático para ver «más fútbol que nunca. Primera, Segunda, Premier, Bundesliga… Y lo que no podía ver lo grababa». Luci, su segundo, se encargaba de viajar para conocer los métodos de trabajo de los técnicos de Primera División. Se siente preparado para ser seleccionador. «He entrenado en todas las categorías y tengo casi 500 partidos de experiencia en Primera». Si alcanza el banquillo de la Roja, la esencia será la misma. «No se puede ir en contra de un estilo. No podemos romper la herencia», advierte.

Source: Deportes