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«Dejaré de ser presidente el día 26 de febrero, ni un día antes», amenazó Joseph Blatter cuando algunos de los patrocinadores le pidieron que se marchara. Pero febrero queda demasiado lejos incluso para la propia FIFA y ayer su Comisión de Ética propuso suspenderlo del cargo de manera provisional durante 90 días. El motivo, el último, es la acusación de la Fiscalía suiza de haber abonado dos millones de euros «de manera irregular» al presidente de la UEFA, Michel Platini.
La sanción compromete también el futuro del francés dentro del máximo organismo del fútbol mundial. Platini pretendía presentarse a las elecciones para heredar el cargo de Blatter, pero si la Comisión de Ética decide suspenderlo, como ha hecho con Blatter, no podría hacerlo.
Esos dos millones de euros que Platini cobró en 2011 correspondían a trabajos realizados entre 1999 y 2002. Platini se ha defendido alegando que el retraso obedece sólo a los problemas de liquidez de la FIFA en aquella época. Sin embargo, la investigación de la Fiscalía sigue adelante al entender que Blatter actuó en perjuicio del organismo que preside.
El futuro de la Federación Internacional se presenta complicado. Otro de los candidatos, el surcoreano Chung Mong-Joon, ha denunciado el intento de sabotaje de su candidatura al ligarla con pagos irregulares en algunos de los proyectos futbolísticos en los que participa la Federación coreana, de la que él fue presidente. Chung es, además, el sexto hijo del fundador de Hyundai y uno de los hombres fuertes de la compañía surcoreana. Hyundai es, precisamente, uno de los pocos patrocinadores de la FIFA que no han retirado su apoyo al organismo.
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«El Comité de Ética no ha tomado decisiones, está esperando más investigaciones. No le han considerado culpable», aseguró al diario británico «The Guardian» el consejero de Blatter, Klaus Stohlker. «Es una situación muy difícil, que no es buena para el fútbol», añade. Y asegura que Blatter, «está tranquilo». «Está plenamente preparado para asumir sus responsabilidades. Es el único que puede liderar la FIFA».
La propuesta de sanción ha sido elaborada por el órgano de instrucción que preside el suizo Cornel Borbely y tendrá que ser aprobada mañana por la Comisión de Ética que preside el alemán Hans-Joachim Eckert. Esta Comisión ya había solicitado más competencias el pasado mes de julio para, por ejemplo, poder explicar sus fallos y poder proporcionar información sobre los procesos abiertos.
Por el momento, la FIFA no ha emitido ninguna comunicación oficial sobre el asunto. Sólo lo hará en el caso de que la sanción a Blatter se lleve a efecto, como hizo en su día con el secretario general de la organización, Jerome Valcke. El francés fue apartado de sus funciones el pasado 17 de septiembre. «Se han puesto en conocimiento de la FIFA ciertas alegaciones acerca del Secretario General y la FIFA ha solicitado a la Comisión de Ética de la FIFA que inicie una investigación formal», decía el comunicado en que se anunciaba el cese «de sus funciones con efecto inmediato y hasta próximo aviso». A Valcke se le acusa de haber participado en una red fraudulenta de venta de entradas para el Mundial de Brasil 2014.
La FIFA hizo pública unos días después la inhabilitación de por vida de Jack Warner como vicepresidente de la organización y miembro del Comité Ejecutivo. «Se ha constatado que el sr. Warner cometió numerosas infracciones de manera constante y repetida durante el desempeño de varios cargos directivos e influyentes en la FIFA y en la CONCACAF», decía el comunicado. Entre otras cosas, se le acusa de cohecho, corrupción, deslealtad y de infringir «las normas generales de conducta».
Si Blatter es inhabilitado, aunque sea de manera provisional y durante noventa días, sería relevado en el puesto de manera interina por el camerunés Issa Hayautou, presidente de la Confederación Africana de Fútbol, también investigado por oscuros asuntos. Blatter reaparecería a tiempo de entregar el Balón de Oro.
Source: Deportes