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Vicente del Bosque tiene tomada la decisión sobre la portería de la Selección, aunque intenta mantener la incógnita hasta la hora del partido. «Le hemos dado muchas vueltas a los onces. No sólo entramos en la situación del portero. Le hemos dado mil vueltas a todo todo el año, pero la decisión final la tomaremos antes del partido», decía ayer en la conferencia de prensa. Pero Del Bosque no improvisa nada y va dejando pistas sobre sus intenciones. «Si vemos que [la polémica] merma las capacidades del jugador tomaríamos medidas. En caso de que no, actuaremos como lo íbamos a hacer. Sin ningún problema», advierte. La polémica sobre el portero del Manchester United a nadie puede afectar más que a él, pero los detalles que apuntan a su titularidad no se quedan ahí. Es habitual que sean los capitanes quienes aparecen ante los medios antes del debut. Así lo hicieron Casillas y Xavi en el Mundial de Brasil, pero ayer Iker no estaba. En su lugar aparecieron Sergio Ramos e Iniesta, el segundo y el tercer capitán del equipo. Iker, capitán desde 2006, fue el primero en dar la cara ante los medios desde 2008 hasta 2014 en todos los torneos. Pero ayer la responsabilidad era de otros.
Del Bosque asegura que no va a tratar de manera diferente a Casillas que al resto de jugadores si le tiene que anunciar que es suplente. «El que no juegue se enterará a la misma hora que todos», dice el seleccionador. Y no cree que eso vaya a afectar al que se quede fuera. «Hombre, son mayores. Ya han pasado la pubertad», añade.
Al seleccionador le ha sorprendido la madurez con la que ha asumido el golpe De Gea y la naturalidad con la que ha dado la cara. Fue él quien quiso salir a dar explicaciones y si ese asunto no le pone nervioso tampoco le va a perturbar su estreno en una Eurocopa. El de hoy puede ser el partido de su estreno en una gran competición, pero ya ha demostrado que puede con todo.
Al portero lo que más le preocupaba era la reacción de su familia. Y al seleccionador le preocupaba cómo podía afectar esa reacción a su guardameta. Pero no hay nada que temer. Los compañeros también reaccionaron apoyando al «13» de España. El primero, Piqué, que lo acompañó hasta en la rueda de prensa que ofreció el viernes e incluso se ofreció a salir con él ante el micrófono. Ayer fue Sergio Ramos el que salió en su defensa. Andrés Iniesta le miró para que fuera el madridista quien respondiera sobre la polémica. «Ha sido una noticia no agradable, que afecta a un compañero de la selección, pero tiene el apoyo de todo el grupo. Ya habló él en primera persona, no vamos a comentarlo», afirmó Sergio en la conferencia de prensa oficial previa al estreno de España contra la República Checa.
La polémica no ha enturbiado el ambiente de la Selección. «La polémica no creo que haya servido para unirnos más. Siempre he presumido de que hay un gran ambiente dentro de la Selección. El grupo debe reforzar a cualquiera que pase por una situación no agradable. Siempre ha habido muy buen grupo, buen ambiente y todos tenemos el mismo objetivo», añade Ramos.
Durante el entrenamiento en el estadio de Toulouse, mientras el resto de jugadores corría por el campo, los porteros se entrenaban por su cuenta. Allí estaban De Gea y Casillas junto a Sergio Rico y su entrenador particular, José Manuel Ochotorena. Ajenos a las carreras de los demás junto al preparador físico de la Selección, Javier Miñano. Pero su carrera es otra, es una carrera individual por la portería de la Selección. Y, si no sucede nada extraño, gana De Gea.
Source: Deportes